21. Mirando al pasado
Cole Williams
No se en que momento mi vida se convirtió en una mierda, tenía una familia y era felíz como cualquier persona normal, ahora son solo vagos recuerdos...
Mi padre era bueno con nosotros siempre trabajando para darnos una vida libre de preocupaciones y mi madre siempre estaba en casa cuidandonos, hasta que un día empezó la peor de las pesadillas.
En ese entonces acababa de cumplir 7 años estabamos en casa comiendo como cada día, sabíamos que mi padre llegaría hasta el anochecer, de pronto se escuchó timbrar el teléfono y mi madre atendió rápidamente.... unos minutos después de contestar la llamada el rostro de mi madre palideció, lágrimas brotaron de sus ojos y de su garganta explotó un grito aterrador.
No sabía que estaba pasando, yo no lograba comprenderlo, hasta que llegamos a un lugar donde habían varias personas dentro, todos vestidos de negro, unos platicaban, otros solo susurraban y ahí al fondo estaban mis tíos llorando junto a una caja grande de madera rodeada de velas y algunos arreglos florales, cuando mi madre me tomó en brazos para mirar lo que había dentro de la caja... era él... mi padre estaba ahí recostado con los ojos cerrados.
- Mamá ¿Porqué mi papá está durmiendo ahí?...
- ... Si mi amor esta durmiendo... porqué él está cansado...
- Pero yo quiero jugar con él...
- Lo siento mi amor pero... pero ya no podrá jugar contigo...
- ¿Porqué no, él ya no me quiere?...
- No mi amor... por supuesto que él te quiere solo que ahora, tendrá que ir a otra parte a un lugar muy lejano...
- ¿Porqué tiene que irse?, yo no quiero que se vaya...
- No te preocupes amor todo estará bien sabes porqué? ... porqué desde donde él esté siempre nos cuidará...
Pasaron los días y mi madre lloraba todo el día encerrada en su habitación, esa tarde alguien tocó a la puerta, eran mis dos tíos preguntando por mi madre, ella salió y me mandó a mi habitación, en cuanto cerré la puerta no tarde mucho en escuchar una gran pelea, se escuchaban gritos, mucho ruido y después un gran silencio, cuando salí mis tíos ya se habían marchado y mi madre estaba tirada en el suelo llorando.
Al día siguiente unos hombres tocaron a la puerta invadieron nuestra casa y sacaron todo cuanto encontraron, no dejaron nada en la casa más que nuestra ropa y se fueron no sin antes advertirnos que sólo nos daban un día para salir de ahí.... (Después me enteré que lo poco que había dejado mi padre sus hermanos se lo quitaron a mi madre, la amenazaron y lo demás es historia)
Mi madre guardo lo poco que pudo y nos fuimos de ahí, llegamos a un edificio de apartamentos se veían viejos, sucios y olían mal, si así eran por fuera imaginen como eran por dentro, las paredes estaban agrietadas, sin pintura y olía a humedad, todo aquí era realmente viejo, mi madre buscó trabajo y trató de sacarme adelante.
Ya habían pasado un poco más de 6 meses desde que nos obligaron a dejar la casa y por más que ella se esforzó no fué suficiente, cada vez bebía más, no había un día que no bebiera... Días después la ví llegar con un hombre, me pidió qué me encerrera en el cuarto, sólo escuchaba ruidos raros pero no salí hasta el siguiente día.
Ya había pasado casi un año desde que comenzó mi tortura, mi madre se prostituía, cada día llegaban hombres diferentes a buscarla o ella llegaba con ellos después de tomar unos tragos.
Mi madre se perdía tumbada sobre su cama, nunca se dió cuenta de lo que pasaba con esos asquerosos tipos que llevaba a casa, comenzaban primero tocandome por encima de la ropa, al pasar los días y como veían que mi madre no decía nada, (por supuesto ella no decía nada... porque no sabía nada, tenía tanto miedo que no podía decirle lo qué estaba pasando porque ellos me tenían amenazado) ... algunos me quitaban la ropa para tocarme con sus asquerosas manos y me pedían que yo los tocara, eso era tan asqueroso y repulsivo....
Un dia uno de esos bastardos me obligó a que le hiciera sexo oral, de mis ojos salían lágrimas sin cesar y sentía unas tremendas ganas de vomitar, tenía tanto miedo que después de todo eso tomé mi ropa y sali corriendo de ese lugar.
A unos días de cumplir 9 años deambulaba por las calles mendigando unas monedas para poder comer algo y dormía en los parques, estuve así por un par de meses.
Un día caminaba felíz hacia un lugar donde vendían comida, tenía demasiada hambre, una señora muy generosa me dio unos billetes, lo suficiente para tener una comida diaria como por tres o cuatro días más, unos tipos me obstruyeron el paso, querían mi dinero pero yo no quería soltarlo ¿Porqué se los daría? me lo habían dado a mí, pero eran tres contra mí... quedé tendido en el suelo llorando adolorido por la golpiza y con hambre, lloraba tan desconsoladamente que hasta llamé la atención de alguien..... me pedía que no llorara más y me preguntaba que me había pasado, trataba de consolarme hasta que dentro de un rato por fin comencé a tranquilizarme.
- Vamos pequeño ¿Porqué lloras?...
- Me robaron mi dinero y tengo hambre...
- No crees que es muy estúpido estar llorando por eso... Debes buscar soluciones... bueno dime ¿Cómo te llamas?...
- Me llamo Cole, Cole Williams...
- Muy bien Cole yo soy Jeff, así qué ¿Tienes hambre? vamos te invito una hamburguesa...
Cuando llegamos hizo el pedido y nos sentamos a esperar, moría de hambre, hacia tanto tiempo que no comía una hamburguesa... Olía delicioso...
- Y .. dime Cole ¿Dónde está tu familia?...
- No tengo... mi padre murió hace casi dos años...
- Ok y ¿Tú madre?...
- No... no lo sé...
- ¿Dónde vives, estás sólo?...
- Duermo en las calles y no tengo familia... la mesera se acercó con la comida y afortunadamente dejamos de hablar para poder comer, mientras comenzaba a pensar qué es lo que éste tipo me pediría a cambio y eso si me ponía nervioso, huí de casa porque no quería seguir con el tormento de aguantar a esos bastardos y ahora tendría que aguantar a otro aquí...
- Sabes yo tengo un lugar... algo parecido a una casa, ahí hay algunas personas que nos consideramos como una familia, de hecho mejor qué una familia siempre nos cuidamos unos a otros... ¿Qué te parece? ¿Te gustaría venir?...
- Yo... no lo sé...
- Vamos no tienes nada que temer ahora somos amigos...
Y así convencido por lo que me había dicho lo seguí... Llegamos hasta una bodega vieja y olvidada, unas cuantas personas estaban dentro, seguimos nuestro camino adentrándonos más a la bodega, fuimos al segundo piso ahí había una habitación bien acondicionada, esa era su habitación personal, me dijo que podía tomar un baño para así descansar y mañana sería otro día...
Por la mañana me mostró lo que hacían, ellos le llamaban "trabajo" son un total de diez personas, todos tienen casi la misma edad que Jeff entre 15 y 16 años eso me hacía el menor, el juguete de todos ellos.
Están entrenados para vivir o morir son muy ágiles, son conocidos en los alrededores, muchos les tienen miedo y con justa razón porque nunca pierden... su trabajo es "asesinar por dinero"... Ellos no preguntan, no cuestionan, solo van por su objetivo y se acabó.
Yo decidí quedarme con ellos, no tenía a dónde ir, era ésto o morir en las calles y no hay que ser tan inteligentes para saber mi decisión, una que tomé a los 9 años y que me arrepentiría unos años más tarde.
Jeff me tomó bajo su protección, me cuidaba... a su modo pero lo hacía, me entrenaba para ser el mejor pues según él el negocio era de los dos, eran largas jornadas de ejercicios pesados, ir a disparar al bosque para mejorar mi puntería y la cereza del pastel... nos ponía a pelear uno a uno según él cómo calentamiento y después eran varios contra uno, gracias a eso recibí varias fracturas.
Con el tiempo de verdad me volví el mejor, entre Jeff y yo nos encagabamos de los trabajos más importantes los demás hacian el trabajo de vigilancia y distracción, eso no les gustaba pero a mí no me importaba.
Jeff siempre me demostró que tenía sentimientos hacia mí, casi desde que puse un pie dentro de la pandilla, pero como le había contado lo que pasó con mi madre y sus clientes él nunca me forzó a nada, solo se limitaba a observarme y proclamarme su "amor", aunque sus supuestos sentimientos hacia mí no lo limitaban a darme unas enormes palizas en nombre de mi aprendizaje según él.
Cierto día llegaron unas personas a hablar con Jeff para un trabajo, tardaron horas hablando a puerta cerrada, después de eso pidió de comer y beber en señal de que habían llegado a un acuerdo de trabajo, como de costumbre me acercó a él y me presentó, habian tres tipos, dos de ellos un poco mayor que Jeff y el otro era como de mi edad, se llamaba Derek y desde ese momento su nombre quedó grabado en mi mente, era tan imponente, tenía una mirada amenazadora pero por irónico que parezca eso me atraía más a él...
Edicion e ideas @mely0825
Idea original @LizzLove7
Idea original @LizzLove7
No hay comentarios:
Publicar un comentario